Chris,
Me acabas de enviar un sms y decido no contestarlo, quizá porque estoy demasiado cansado para jugar este juego de idas y venidas de sms.
Cojo nuevamente mi celular. Leo tu sms... textualmente dice:
algún día me responderás?? ay, M ; no se xq te quiero tanto. me dices que te gusta que te diga las cosas directas. no te parece directo que te diga que dejaría todo por estar contigo, cómo te digo QUE QUIERO ESTAR CONTIGO!
Apareciste en forma de un mail tomado a la ligera, con una linda foto de perfil en la que sales lindísimo sonriendo de lado. Ni siquiera se bien cómo me animé a contestar y dejarte mi mail. Lo admito: soy demasiado fácil con los chicos muy lindos.
El juego de ser sociable vía internet no siempre es mi fuerte. Siempre termino prejuzgando a las personas, y me aburro fácil con el cuestionario de rigor. Es más fácil eliminar que agregar... Les debe pasar a todos.
Tú, en cambio, me haces reír siempre. Me gusta tu actitud complaciente que baila al compás de mis bromas engreídas. Me regocijo oyéndote, y me encanta tu voz de dibujo animado.
Me encanta que me despiertes con tus sms y que durante el día llenes mi buzón del celular con tus preguntas, respuestas, cuestionamientos y todo aquello que no temes -como yo- decir a viva voz...
Lo siento, yo no soy así. Tengo mis propias barreras, tontín.
Me detengo y pienso en tu aroma. Quisiera retroceder el tiempo y no dejarme aturdir por la velocidad de mis emociones para no dar pasos en falso. Y permitirme quererte mucho más...
Conozco mucho de tí, y todo me gusta. Lo se, tú eres mi chico casi perfecto; pero solo tienes un defecto: que no eres soltero...